Tetris no necesita presentación. Lleva más de 40 años siendo el favorito de generaciones, y en 2025 sigue siendo uno de los juegos más jugados del mundo. ¿Por qué? Vamos al grano.
Tetris tiene esa mezcla rara de ser super fácil de entender pero imposible de dominar. Es un juego tan sencillo que cualquiera puede aprender a jugar en minutos, pero en cuanto te metes en el rollo de mejorar, te das cuenta de lo difícil que es realmente. Cada partida se convierte en una obsesión por superar tu propio récord. Y eso engancha, lo hace adictivo.
Además, el juego está en todos lados, literalmente. Desde sus inicios en el Game Boy, luego en juegos para PC sin necesidad de internet, en el celular o en plataformas de realidad virtual. Tetris se ha mantenido presente sin importar qué tecnología esté de moda. No importa dónde estés o qué dispositivo tengas, siempre puedes jugarlo.
Una de las cosas que hace a Tetris eterno es lo impredecible que es. Cada partida es diferente porque las piezas caen de formas distintas. El desafío siempre está ahí, nunca es lo mismo. A cada rato puedes encontrar algo nuevo en cada partida, y eso mantiene el interés a largo plazo.
La facilidad de poder jugar
Y aquí viene lo más interesante: jugar Tetris genera lo que llaman flow, ese estado en el que te concentras tanto que el tiempo se detiene. Es como una meditación activa, y esa sensación de estar completamente metido en el juego, resolviendo problemas sin parar, es lo que lo hace tan satisfactorio.
Tetris conecta generaciones. Padres que jugaron en los 90 ahora pueden hacerlo con sus hijos en el móvil. Esa conexión intergeneracional es algo que pocos juegos han logrado, y es una de las razones por las que sigue siendo relevante para todo tipo de jugadores.
Y claro, el poder de la nostalgia no puede faltar. Para muchos, Tetris no es solo un juego, es un pedazo de su historia personal. Ya sea por aquellas tardes con el Game Boy o los recuerdos de la infancia, siempre hay algo que te hace volver.
Tetris sigue evolucionando sin perder lo que lo hace único. Nuevas versiones, como Tetris 99, o las de realidad aumentada, le dan un aire fresco sin cambiar lo esencial. Por eso, en 2025, sigue siendo el juego al que todo el mundo vuelve una y otra vez.